martes, 18 de marzo de 2014

Las buenas maneras, o el hábito de poner buena cara

Son tiempos difíciles. Eso dicen en todas partes, no? Poco podemos hacer, pero siempre hay algo que hacer. Yo propongo hacer buena cara, os lo explico en unos pocos ejemplos:

1. Buenos días! Siempre hay que dar los buenos días a la secretaria, a la portera, a tu novio, a tu compañero de trabajo. Parece pesado, o anticuado, pero mejora el ambiente al instante, siempre y cuando haya una sonrisita que acompañe la frase.



 2. Hola y adiós. ¿Saludáis cuando entráis a las tiendas? Allí hay gente que os espera, no cuesta nada decir hola, veréis como os sonríen. No hay que ser tímidos, los hola deben ser potentes, para que se oigan! Lo mismo al salir, aunque no compréis nada, la gente se merece que les digan adiós...



3. Aclara las cosas. Todos nos enfadamos en casa, en el trabajo... Mi consejo es que evites por todos los medios alargar estos conflictos. Te has peleado porque él no fregaba los platos? Hazle morros, pero sólo un rato. Antes de salir a trabajar mañana por la mañana di algo que indique que estás menos enfadado/a, que se te está pasando. Esto libera mucha tensión, por la noche ya acabaremos de arreglarlo. Con la ventaja de que la pelota será bastante más pequeña a esa hora. Esto es aplicable a todos los ámbitos y a todos los conflictos. Si le contestas mal a tu colega, no te cuesta nada dejarle un postit con un "quizás me pasé, lo siento", o quizás un “podemos hablar? Antes me has pillado en un mal momento, nos tomamos un café?”



4. Contesta siempre. Aunque tardes, siempre debes contestar los e-mails, los whats, las llamadas. No te sientas obligado a hacerlo instantáneamente (eso no es vida!), pero guárdate un ratito para hacerlo. Es tan simple como "he visto que me has llamado, te puedo llamar ahora?", o quizás "gracias, he recibido el archivo. Nos vemos".  Esto parece una soberana tontería, pero demuestra responsabilidad, educación y formalidad. Es algo que hace quedar muy bien delante de los jefes, o de alguien que tiene que hacer una gestión para ti. Imprescindible.





5. Da las gracias. Absurdo a la vez que necesario. Siempre hay que dar las gracias. Te han acercado a casa después de trabajar, o te han hecho un favor, o te han traído nosequé de nosédonde. Puede haber supuesto un esfuerzo o quizás le svenía de paso, pero tú no lo sabes. Ante la duda, muéstrate agradecido: a veces gracias es suficiente, a veces es un postit, un caramelo, otro favor… sé creativo!!

Creo que con 5 ejemplos veis por dónde voy. Podemos añadir la importancia de recordar los cumpleaños, programar llamadas a familiares (sobretodo a los que no nos apetece llamar!), y seguir con un montón de cosas más. En próximos posts ya hablaremos de maneras de hacer estas cosas, os daré algún recurso que os ayude y os facilite la tarea.

Recuperar un poco las buenas maneras nos ayudan a ser un poco menos cascarrabias y un poco más agradables, y hace que la gente a nuestro alrededor se sienta un poco más cuidada, un poco más valorada. Mi experiencia en este tema es fabulosa. La gente se predispone a estar un poco de mejor humor si le saludas, si les das las gracias. Todo contribuye q facilitar un poco la vida... Probadlo y a ver qué tal!

No hay comentarios:

Publicar un comentario